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Los científicos chinos han desarrollado un rifle automático diseñado para drones. El arma dispara balas de 7,62 mm como el AK-47 a una velocidad de 740 a 900 m/s a 10 m, igualando la potencia del AK-47.
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La innovación clave de esta arma es la ausencia casi total de retroceso, que se describe como tan ligero como presionar un teclado. Según los científicos e ingenieros del proyecto, incluso los drones de consumo o los perros robóticos de juguete pueden utilizar y disparar fácilmente estas armas.
Los pequeños drones se limitaban a lanzar granadas o minas de mortero en campos de batalla como los que tienen lugar en Ucrania. Incluso las modernas plataformas no tripuladas y los drones muy modificados tienen dificultades para hacer frente al retroceso de las ametralladoras, lo que reduce su precisión y flexibilidad. El nuevo rifle, desarrollado por el equipo del profesor Liu Penzhang del Departamento de Ingeniería Mecánica y Eléctrica de la Universidad del Norte de China, tiene como objetivo resolver estos problemas, informa el South China Morning Post.
Al perforar un agujero en la parte posterior del cañón, el equipo descubrió que podían liberar una onda de choque de gas procedente de la explosión de pólvora. Para mantener la velocidad de la bala, desarrollaron un nuevo diseño con un sello de alta resistencia en la parte posterior y un chip de inducción electromagnética en el interior.
Cuando se da la orden de disparar, el chip enciende el explosivo lanzando la bala. Bajo la acción de la presión, rompe la membrana y sale volando por el agujero, reduciendo el retroceso y manteniendo una alta velocidad inicial de la bala.
Según los investigadores, el arma tiene un diseño sencillo y de bajo coste, ya que para detonar el chip basta con una bobina en el cañón, que está protegida por una capa de cerámica resistente a altas temperaturas y presión.
Un nuevo tipo de arma, desarrollado por un equipo de la Universidad del Norte de China con la participación de ingenieros militares, ha demostrado su eficacia durante numerosas pruebas. Los detalles del proyecto se publicaron este mes en la revista académica Acta Armamentarii, revisada por pares, donde el equipo de Liu confirmó el éxito del desarrollo al abordar los desafíos clave de la guerra no tripulada.
Durante las pruebas, el rifle se suspendió en el aire y se disparó con solo 1,8 cm de oscilación de adelante hacia atrás, lo que demuestra su retroceso mínimo.
China ha obtenido una ventaja significativa debido a su capacidad industrial en el desarrollo de este tipo de armas. Sin embargo, en respuesta a las crecientes preocupaciones sobre el posible uso indebido de sus innovaciones y productos, Beijing recientemente agregó drones de doble uso y tecnologías relacionadas a su lista de control de exportaciones.
Además, la Universidad del Norte de China ha demostrado ser una institución de investigación clave en la creación de armas tan avanzadas, y la cooperación entre los expertos científicos de la universidad y los ingenieros de varias empresas militares-industriales chinas desempeña un papel clave en el desarrollo de las armas chinas. industria.
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